A lo largo de estos 14 meses la pandemia pareciera no cesar, vemos como pico tras pico hay un incremento en la severidad y en la mortalidad. La ciencia ha llenado de promesas a la gente con las vacunas y sin embargo, aún no logramos ver como estas logran detener la infección y su impacto. Unido a esto se evidencia una crisis económica que ha llegado afectar la calidad de la alimentación de los ciudadanos y su salud emocional. Esto es favorecido porque el pueblo, aún de dura cerviz no ha vuelto los ojos al Señor.
Señor clamamos para que como tus hijos seamos despertados y entremos en entendimiento para clamar por el pueblo y que venga ese fluir de tu espíritu que redargüya a todo el pueblo de pecado, de justicia y de juicio para que unánimes volvamos a ti e invoquemos tu nombre de tal forma que el pecado sea perdonado y veamos la sanidad sobre sobre toda carne y la tierra.
Proverbios 29:1 “El que se pone terco cuando lo reprenden, pronto será destruido sin remedio.”
Jeremías 19:15 “El Señor todopoderoso, el Dios de Israel, dice: “Voy a enviar a esta ciudad y a todos sus poblados todos los castigos que les he anunciado, porque se han puesto tercos para no obedecer mis palabras.”
1 Crónicas 7:14 y se humilla mi pueblo sobre el cual es invocado mi nombre, y oran, buscan mi rostro y se vuelven de sus malos caminos, entonces yo oiré desde los cielos, perdonaré su pecado y sanaré su tierra.
Juan 16:8-11 Y cuando Él venga, convencerá[a] al mundo de pecado, de justicia y de juicio; de pecado, porque no creen en mí; de justicia, porque yo voy al Padre y no me veréis más; y de juicio, porque el príncipe de este mundo ha sido juzgado.
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Iglesia Cristiana en Barranquilla, Casa de Fe y Obediencia.
