
Agradecemos al corderito por haber pagado el precio que nosotros debíamos pagar, por ser el cordero que se llevó de nosotros toda la maldad y roció su sangre sobre nosotros.
Nos unimos a la adoración del trono a la honra que es soltada en este lugar y nos unimos al testimonio del cordero que eres fiel y verdadero. Reconocemos la gloria que te despojaste, estamos próximos a celebrar el día que el verbo se hizo carne.
Reconocemos que la sangre de Cristo satisfizo la demanda de justicia que había sobre nosotros. Sangre que nos limpia, que nos sana, que nos provee y que transforma nuestro código genético.
Nos arrepentimos por no valorar la sangre de Cristo, pisoteamos la sangre con nuestros pecados, pedimos perdón por no haberle dado valor al sacrificio de Cristo.
Presentamos a cada familia de nuestra nación, que atraigas a cada una a la revelación del corderito que cargó con todos los pecados.
Declaramos que la voz de la sangre comienza a venir y a manifestarse, trae convicción de pecado de justicia, que la voz les testifique lo que el Señor hizo por ellos. y se abre el camino de sangre para cada uno de ellos.
Quieres asistir a nuestras reuniones contáctanos para más información.
Iglesia Cristiana en Barranquilla, Casa de Fe y Obediencia.